December solo tiene once años, pero ya sabe cuál es su destino: va a convertirse en pájaro. Un día no muy lejano de la cicatriz de su espalda brotarán unas alas y echará a volar lejos, muy lejos. Y por fin abandonará la casa de acogida en la que ahora está encerrada. Pero antes debe entrenarse muy duro, porque volar no es cosa fácil.
Los adultos sospechan, hacen preguntas. Pero December no le cuenta a nadie sus planes, ni siquiera a su mejor amiga. Sabe que no la creerían, así que finge normalidad hasta que llegue el momento de partir. Y ese momento está cada vez más cerca: está a punto de saltar y de emprender el vuelo. Miradla coger impulso.
«Es imposible soltar un libro que te hace surcar el cielo a tanta altura. Gracias, December, por demostrarme que se puede volar con las palabras.»
DAVID REES

Sandy Stark-McGinnis entiende bien las luchas diarias y los problemas cotidianos de los chavales, ya que desde hace dieciséis años ejerce de profesora al norte de California, donde vive con su marido y dos hijos. La gran prueba es este libro, La chica pájaro, su debut en la literatura middle grade. Hasta ahora había cultivado más la poesía y el relato corto, en publicaciones como Quercus Review, In the Grove y Penumbra, o cursando un máster de escritura creativa. El éxito editorial de La chica pájaro parece prometer que no será su última obra dedicada a los lectores más jóvenes, a los que, además, sigue dando clase en su colegio. Seguramente la siguiente idea la espera entre alguno de sus alumnos.