Esta historia arranca así: «Estoy en Europa pero yo no quería venir a Europa». Ibrahima Balde nació en Guinea, pero se vio forzado a abandonar su casa para ir a buscar a su hermano pequeño. No salió para perseguir un sueño. Abandonó su hogar para encontrar a la persona que más quería.
La historia de Ibrahima se ha traducido a más de diez idiomas, ha recibido multitud de premios y ha sido uno de los libros más leídos del año. Mientras tanto, Ibrahima vive en Madrid, donde trabaja como mecánico. Cuando le preguntaron, en una entrevista en El País Semanal, qué esperaba del futuro, contestó: «Que la salud de mi madre mejore. Aunque lleves a tu madre a hombros hasta La Meca, no habrás pagado ni un céntimo de todo lo que ella ha hecho por ti».
Con los derechos de autor de este libro donde cuenta la búsqueda de su hermanito, paga la escuela de sus hermanas y el piso de su madre.

